368. BALADA DEL VIEJO CALAVERA
Contra su corazón está luchando,
me da besos de niña a su manera;
y no sabe que el viejo calavera,
poco a poco a su ritmo va ganando.
Todavía la sigo toreando,
se resiste a embestir a la primera;
morena de ojos negros que a mi vera
lentamente pasea caminando.
De la noche soy el mayor vampiro
y ella la princesa presumida
a la que se le escapa algún suspiro.
Preciosa si me mira está perdida,
mas bien estoy perdido si la miro,
la tengo demasiado consentida.
José Luis Guillén Lanzas, 20 Agosto 2019