693. EL INTENTO
Intentó impresionarme con millones,
con ladrillos, fanegas y canteras;
de boca en boca como las rameras,
me quería sumiso y sin cojones.
Contigo no he gastado mis condones
ni siquiera pretendo que me quieras.
Devuélveme mis cartas, no te enteras
que me dan asco tantas posesiones.
Intentaste comprarme con dinero,
y perdiste tu tiempo, no la pasta:
Berenice, lo siento, no te quiero.
Quédate con alguno de tu casta
y aunque siga soltero no te espero
que así es como el poeta se las gasta.
José Luis Guillén Lanzas, 2021-07-13